Hoy día 25 de abril, se celebra el Día Internacional por la promoción del Bienestar Infantil. Con esta fecha se pretende visibilizar los derechos de la infancia a nivel mundial y concienciar a la comunidad sobre las consecuencias del maltrato contra niños, niñas y adolescentes.
“ Delincuente...Estoy en un centro de protección, no he cometido ningún delito. Para eso hay otros centros.”
“No es mi culpa, yo solo soy un niño/a.”
Frases del Consejo de Participación de Adolescentes en Acogimiento Residencial en la isla de Tenerife .
Con motivo de esta celebración queremos poner de relieve la situación que atraviesan los niños, niñas y adolescentes que se encuentran en el sistema de protección.
Por diversos motivos, no todas las familias pueden ofrecer a sus hijos e hijas un entorno familiar adecuado y, pueden existir situaciones donde se vulneran sus derechos poniendo en riesgo su desarrollo y bienestar. Se dan situaciones donde las necesidades básicas de la infancia y la adolescencia, físico-biológicas, cognitivas, emocionales, sociales y de seguridad, no son satisfechas de manera adecuada; y/o viven situaciones de violencia que pueden dejar una huella traumática que condiciona el desarrollo y la integración en la sociedad que construimos entre todos/as.
Como consecuencia de la desprotección familiar encontramos a un cierto número de niños, niñas y adolescentes en situación de desamparo y tutelados por la administración o en situación de riesgo. Debemos partir de la premisa de que se hallan en este sistema por una causa de desprotección ajena a ellos, por lo que tenemos que asumir el compromiso social de respetar sus derechos.
La Unidad Orgánica de Infancia y Familia (UOIF), del IASS, es el organismo encargado en el Cabildo de Tenerife, de desarrollar las competencias en materia de protección de menores que le otorga la ley. Es la responsable de dar cumplimiento a las tareas encomendadas en el ámbito de Infancia y Familia, respecto a la prestación de servicios especializados en cuestiones de prevención y ejecución de las medidas de amparo. Concretamente se encarga del desarrollo de la medida de Acogimiento Residencial, contando con una red de centros de protección desplegada en la isla para responder a las necesidades de los niños, niñas y adolescentes que tutelados no pueden acceder a un acogimiento familiar.
La promoción del BIENESTAR INFANTIL es el eje central de la intervención, de esta intervención. Estos niños, niñas y adolescentes han vivido diversas situaciones de adversidad, en etapa tempranas y sensibles para su desarrollo, y, por lo tanto, su adaptación y su recuperación posterior dependerá en gran medida del afecto, la estabilidad y la seguridad que reciban una vez protegidos.
Este es el marco en el que la Unidad Orgánica de Infancia y Familia, trata de dotar a niño, niña y/o adolescente de previsible larga estancia en Centros u Hogares, de una experiencia con otras familias que les permitan vivenciar otros modelos de relación y vinculación. Estas familias son recursos que promueven la activación de su capacidad de resiliencia y para desempeñar esta labor se ha estructurado el proyecto FAMILIAS COLABORADORAS.
El proyecto “Familias colaboradoras” es un proyecto de apoyo a los niños, niñas y adolescentes dirigido a fomentar su desarrollo integral: personal, emocional y social. Se presenta como un proyecto facilitador de alternativas referenciales diferentes y externas al contexto residencial, proporcionando espacios de vida normalizados y apoyos sociales
Por otra parte, es un proyecto favorecedor de generar influencia de referentes positivos como fuente de apoyo y resiliencia que ayuden a visibilizar la realidad de los jóvenes en acogimiento residencial.
¿Quién puede ser Familia Colaboradora?
Cualquier persona y/o modalidad familiar que se compromete a compartir su tiempo con un mismo niño, niña y adolescente a salidas puntuales, fines de semana y/o periodos vacacionales según disponibilidad y ofrecimiento.
En definitiva, un programa que ayuda a los NNA en acogimiento residencial a crear experiencias reparadoras, un modelo familiar positivo y la posibilidad de crear vínculos sanos y estables. Considerando la figura de Familia Colaboradora, como un apoyo de protección y que satisface las necesidades y promueve el bienestar de los niños, niñas y adolescentes en acogimiento residencial.
¿Quieres más información sobre el proyecto? Haz click en el siguiente enlace.
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